viernes, 16 de agosto de 2013

viernes, 16 de agosto de 2013

 

Dispara a un cazador tras discutir por unos perros en Granadilla

Un hombre de 48 años recibió perdigones en varias partes del cuerpo, después de que sus canes llegaran a la finca del ahora detenido, que les dijo que no quería verlos por allí. 

Pedro Fumero, S/C de Tenerife

 Un cazador de 48 años, Clemente B.R., vecino de Granadilla, resultó herido de consideración en la mañana de ayer tras mantener una discusión con otro hombre, identificado como Juan M.R., vecino de San Isidro, que le disparó con una escopeta y le provocó lesiones en varias partes de su cuerpo en Granadilla. La víctima fue hospitalizada, aunque su vida no corre peligro.

Los hechos ocurrieron sobre las 10 de la mañana cerca del barranco Las Moradas, en las cercanías del caserío de El Desierto. La víctima y otro compañero cazador caminaban por la zona con sus perros y hurones y los canes de la víctima se aproximaron mucho a la finca del ahora detenido, de 58 años. Entonces, el dueño del terreno les dijo que no quería verlos por allí y les exigió que se fueran. Las partes implicadas, que ya se conocían, mantuvieron una fuerte discusión. El dueño de la finca dejó la zona en su todoterreno y fue a su casa de San Isidro, en la calle Sombrerito, donde cogió su arma de fuego y regresó a Las Moradas. Una vez en la finca, dejó la escopeta en el suelo y llamó a los cazadores, y cuando la víctima estaba cerca se agachó, cogió el arma y disparó.



La víctima sufrió lesiones en un hombro, el pecho, el abdomen, la zona genital y las piernas, según diversas fuentes consultadas. Las lesiones no llegaron a tener carácter grave, a tenor del informe del médico del helicóptero del Servicio de Urgencias Canario (SUC) que asistió al herido. La víctima fue trasladada hasta el aeropuerto de Los Rodeos en la citada aeronave y, posteriormente, hasta el Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria en una ambulancia. La alerta por el suceso llegó a la sala operativa del 1-1-2 a las 10:10 de la mañana y hasta el lugar acudieron policías locales de Granadilla, agentes de la Guardia Civil, bomberos y guardas de caza del Consorcio de Gestión Cinegética. El Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil lleva a cabo la investigación del caso.

Los agentes tomaron declaración ayer al supuesto autor del disparo y a las primeras personas que llegaron al lugar. La Guardia Civil imputará un delito de homicidio en grado de tentativa a Juan B.R., que en breve pasará a disposición de la autoridad judicial. "Fue a su casa, cogió el arma y disparó" Una de las fuentes consultadas durante la jornada de ayer explicó que el suceso ocurrió en el paraje del barranco de Las Moradas, por debajo de la gasolinera Euroguarapo, que está situada en la carretera que enlaza San Isidro con Chimiche. El enfrentamiento entre el cazador y el dueño de la propiedad se produjo en las proximidades de un coto de caza conocido como Cueva Gacha. Esta fuente manifestó que el enfrentamiento entre las partes se produjo después de que los perros llegaran muy cerca de la propiedad del supuesto autor del disparo. Durante una acalorada discusión, la persona identificada como Juan B.R., vecino del núcleo de San Isidro, "cogió el arma, regresó y disparó", según señaló la mencionada fuente.

Respecto al acusado de utilizar la escopeta, se trata de una persona que hace años también practicó la caza y estuvo federado. Sin embargo, hace algún tiempo que no practicaba tal modalidad deportiva.

En cuanto a la víctima, ayer trascendió que se llama Clemente y que reside en el casco urbano de Granadilla de Abona.

La actividad cinegética que se desarrolla en estas semanas, y que empezó el día 4 de agosto, solamente permite el uso de perros y hurones para la caza del conejo, mientras que para la caza de la perdiz y otras especies de pluma el uso de las armas de fuego estará permitido a partir del 8 de septiembre.

Fuente: ELDÍA.es

Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente


Real Decreto 630/2013, de 2 de agosto, por el que se regula el Catálogo español de especies exóticas invasoras.

Las especies exóticas invasoras constituyen una de las principales causas de pérdida de biodiversidad en el mundo, circunstancia que se agrava en hábitats y ecosistemas especialmente vulnerables, como son las islas y las aguas continentales. La introducción de estas especies invasoras también puede ocasionar graves perjuicios a la economía, especialmente a la producción agrícola, ganadera y forestal, e incluso a la salud pública.


Existe una gran preocupación por la creciente expansión de estas especies. El Convenio de Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica, ratificado por España en 1993, reconoció la existencia de este problema y estableció en su artículo 8.h que cada Parte Contratante, en la medida de sus posibilidades, impedirá que se introduzcan, controlará, o erradicará las especies exóticas que amenacen los ecosistemas, los hábitats o las especies.