Medio Ambiente encuentra refugios en los que dejar libres al lagarto gigante
Cabildo Insular de La Gomera
La Unidad de Medio Ambiente del Cabildo de La Gomera ha localizado dos puntos idóneos para proceder a la suelta de los lagartos gigantes. En concreto, los lugares elegidos son el Monumento Natural de Los Órganos y el Sitio de Interés Científico de Acantilados de Alajeró. El Patronato de Espacios Naturales Protegidos reunido hoy bajo la presidencia de Casimiro Curbelo Curbelo
La consejera subraya que con la puesta en libertad de los ejemplares se cumple con el plan de recuperación del lagarto gigante dentro del programa europeo aprobado en su momento. Una vez que se proceda a realizar dos sueltas, una en mayo y la otra en septiembre, desde Medio Ambiente se hará un seguimiento de la evolución de los lagartos gigantes en su nuevo hábitat.
En estos momentos se cuenta con más de 350 ejemplares cautivos y por lo tanto se considera que ya ha llegado el momento de proceder a su reintroducción en el medio natural de un máximo de130. Por ello, desde finales de 2013 se procedió a buscar enclaves adecuados y con este fin se hizo el correspondiente encargo a un escalador que realizó un estudio de las zonas más adecuadas. En la elección se tuvieron en cuenta factores como que la zona estuviera lejos de los núcleos urbanos, que no hubiera deprendadores, facilidad de acceso así como disponibilidad de alimento y de refugios. Con estas premisas en la mano se han encontrado estos dos refugios para los lagartos, ambos dentro de la Red Canaria de Espacios Naturales Protegidos. En el caso de Los Órganos se instaló en su momento una valla que impide que los gatos entren en el refugio. Ahora se están llevando a cabo labores de trampeo de otros depredadores tales como ratas.
En el caso de los acantilados de Alajeró se considera también que reúne todas las condiciones pero sin embargo a diferencia de Los Órganos es más fácil que entren depredadores. Entre las medidas que se están tomando para que los lagartos puedan sobrevivir en el medio natural, está por ejemplo, someter a 150 de ellos a un entrenamiento antidepredador, de los que finalmente se elegirán los 130 más aptos. De esta manera los individuos reconocen como enemigos, por ejemplo, a los cernícalos. Para ello se dispone de un sistema de cuerdas y una maqueta de un ave simulando el descenso de ataque. Así se considera que se incrementa la supervivencia de los ejemplares. La suelta puede ser en uno de los dos lugares elegidos o en ambos a la vez.