miércoles, 26 de marzo de 2014

Gobierno canario modifica anexos del Catálogo de Especies Protegidas para adaptarlo a la directiva europea

El Gobierno de Canarias, reunido en Consejo de Gobierno, ha aprobado el proyecto de decreto por el que se modifican los anexos de la Ley 4/2010, de 4 de junio, del Catálogo Canario de Especies Protegidas, con el objetivo de adecuar la legislación autonómica en materia de conservación de la biodiversidad a la directiva europea.

Pinzón Azul
La variación consiste en el cambio de categoría de un total de 36 taxones y la inclusión de otros 27 que no habían sido recogidos en el Catálogo vigente. La mayoría de estos taxones se incluirían en el Anexo IV 'Protección Especial' y tres se catalogarían como 'vulnerables', informa el Ejecutivo en una nota.

Con esta iniciativa se cumple con la Directiva 92/43/CEE del Consejo, de 21 de mayo de 1992, relativa a la conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestre y, más concretamente, a lo referido a las especies que requieren una protección estricta y que figuran su anexo IV.

Asimismo, el Gobierno señala que se dota a la legislación canaria de coherencia respecto a lo dispuesto en la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y la Biodiversidad y el Real Decreto 139/2011, de 4 de febrero, para el desarrollo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y del Catálogo Español de Especies Amenazadas.

martes, 25 de marzo de 2014

Los furtivos, una lacra para las especies, el campo y los cazadores

Las multas a las que se exponen quienes transgredan el amplio número de prohibiciones que recoge la Ley de Caza en Canarias pueden llegar a los 9.000 €

 


Víctor Rastrilla
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA
El individuo que caza sin la autorización pertinente o a la escondida, en la época de veda, es un furtivo, aunque este término es utilizado de forma común para cualquiera que transgreda el amplio número de prohibiciones o limitaciones recogidas en la vigente Ley 7/98 de Caza de Canarias.

El furtivo es una lacra para las especies, el campo y los cazadores que cumplen con las normas, y un problema que no se ha podido erradicar. Cazadores con jaurías de perros que arrasan por donde pasan, un perro suelto con un talento extraordinario para suministrar de conejos a su dueño, o quienes pegan un par de tiros para abatir una pieza en su propiedad y luego se esconden son algunos ejemplos conocidos de furtivos.

Y para la lucha contra estos elementos la Ley contempla cuatro tipos de sanciones tipificadas como infracciones administrativas. 
Las infracciones leves conllevan una multa de 30,05 a 150,25 euros. Un ejemplo de infracción leve es cazar siendo titular de una licencia válida, pero no presentarla cuando sea requerido para ello por los agentes de la autoridad.

La segunda es la ‘infracción menos grave’, que acarrea una multa que oscila entre los 150,26 a los 601,01 euros. Un ejemplo es el de una persona, cazador o no, que permitiese vagar a sus perros en época de veda o prohibición.

La infracción ‘grave’, con multa que va de los 601,02 a los 3.005,06 euros, puede ser reintroducir, repoblar y trasladar piezas de caza sin contar con autorización.

La ‘muy grave’ supone una multa de 3.005,07 a los 9.015,18 euros, y uno de los ejemplos es el hecho de cazar desde automóvil o transportar en ellos armas desenfundadas y listas para su uso, aunque no estuvieran cargadas.

Además, las infracciones menos graves, graves y muy graves podrían llevar aparejada la retirada de la licencia de caza e imposibilidad para obtenerla por un periodo que oscila entre un año y ocho. 

La graduación de las sanciones se aplican por el cabildo correspondiente atendiendo a la intencionalidad, del daño producido, el ánimo de lucro ilícito y la reincidencia. En este sentido, algunos hechos punibles según la Ley pueden tramitarse por el código penal como delitos contra la fauna.

Una vez cerrado el expediente sancionador, los sancionados pasan a formar parte del Registro de Infractores de Caza de Canarias (Riccaza) gestionado por el Gobierno de Canarias y abastecido por las anotaciones transferidas desde los cabildos. En 2010 el Riccaza contaba para la provincia de Las Palmas con cinco infractores registrados en Gran Canaria, ninguno en Fuerteventura y uno en Lanzarote. Por contra, sobresalían los 341 de Tenerife, tres en La Gomera, y ninguno en La Palma y El Hierro por la provincia de Santa Cruz de Tenerife.

Gobierno de Canarias -Mixomatosis- 1996



Resolución de 18 de marzo de 1996, de la Dirección General de Producción Agraria, por la que se establecen medidas para lucha contra la mixomatosis en el  ganado cunícola. 

Conejo híbrido y con mixomatosis 
Considerando que el pasado año se detectaron brotes de mixomatosis en conejos en la isla de Gran Canaria, y recientemente han aparecido focos en la isla de Tenerife.
Considerando las características del proceso, y en especial el alto porcentaje de morbilidad y mortalidad que causa, así como su rápida difusión.
Considerando la alteración que supondría para el equilibrio ecológico de la fauna canaria el que una especie tan significativa como el conejo silvestre se vea afectada por una enfermedad de estas características.

Teniendo en cuenta la repercusión económica que supondría para el sector cunícola del Archipiélago, el que esta enfermedad afectara a las explotaciones intensivas.
Vista la Ley de Epizootías, de 20 de diciembre de 1952, y el Decreto de 4 de febrero de 1955, por el que se aprueba el Reglamento que la desarrolla, cuyo fin es dictar las medidas encaminadas a evitar la aparición y difusión de las enfermedades epizoóticas, y teniendo en cuenta que la mixomatosis es una de las enfermedades objeto de este reglamento, según se establece en el artículo 6º.

lunes, 24 de marzo de 2014

EN 10 AÑOS SE HAN LOCALIZADO 45

Los hurones asilvestrados apenas dan señales de vida

Imagen de un hurón asilvestradado (Foto: Blog Invasiones Biológicas)                                                                                   




Hace tres años, tras detectarse que los pequeños mustélidos cimarrones se estaban reproduciendo en el medio natural, se planteó la necesidad de elaborar un plan para conocer y controlar su evolución en los montes de La Palma.

Los hurones asilvestrados, hace menos de un lustro, provocaron cierta inquietud en La Palma al detectarse en aquellas fechas que habían empezado a reproducirse en el ecosistema insular y, como depredador introducido, podrían comenzar a escalar posiciones en la cadena trófica. Incluso se planteó, en 2010, la necesidad la elaborar un plan para controlar su desarrollo en los montes. Sin embargo, estos pequeños mamíferos carnívoros, aunque no se ha hecho un seguimiento exhaustivo, desde hace unos tres años, apenas dan señales de vida, según ha indicado a LA PALMA AHORA Félix Medina, doctor en Biología e investigador principal de un estudio científico sobre la presencia de estos animales introducidos en la Isla cuyas conclusiones se publicaron en 2010 en la prestigiosa revista Oryx. No obstante, Medina considera que, si bien no ha sido todavía preciso redactar el plan de control que se planteó entonces, “es conveniente” estar al tanto de su evolución en el medio natural de la Isla y, en consecuencia, estima oportuno seguir analizando la situación de la reseñada especie para conocer mejor su implantación en los bosques de La Palma.

Entre los años 1998 y 2007, explica Félix Medina, se localizaron 45 hurones asilvestrados en 28 puntos distintos de La Palma. Estos son, dijo, los últimos datos que se disponen de su existencia en el entorno natural de la Isla.
Ha apuntado que, desde hace varios años, no se han detectado más ejemplares, aunque ha insistido en que no se ha hecho un seguimiento profundo al respecto. También ha indicado que “no ha habido nuevas denuncias de daños originados por estos animales ni han tenido noticias de ejemplares atropellados” en carreteras, vías o caminos que permitan determinar su presencia en más zonas de la Isla.
Según Felix Medina, el primer trabajo sobre los hurones asilvestrados en La Palma surgió en 1997 a raíz de unas denuncias de ganaderos que aseguraran que los pequeños carnívoros se habían comido varias gallinas de sus granjas. En el año 2006, dijo, capturaron unos diez mustélidos en Garafía, en concreto, en los pagos de Don Pedro, Santo Domingo y Las Tricias.
Félix Medina aconsejó llevar a cabo entre los aficionados a la caza una campaña de concienciación para que se cumpla la normativa que regula el uso de hurones en la práctica cinegética. La aludida reglamentación, ente otras cuestiones, establece que estos animales deben llevar, cuando salen al campo, un zálamo.
Según se indica en el reseñado estudio, publicado en 2010 en la revista Oryx, La Palma es la isla del Archipiélago canario con “el mayor número de hurones asilvestrados”. Los autores del mismo detallan que la caza de conejos con hurones, permitida por el Gobierno regional, es “una práctica antigua y común que tiene sus inconvenientes cuando se escapan o quedan en libertad” los mustélidos.
El repetido estudio, recordó Félix Medina, autor principal del aludido trabajo científico, junto con el también biólogo Aurelio Martín de la Universidad de La Laguna, se inició en 1997 a raíz de la aparición de varias gallinas muertas en una granja de Garafía como consecuencia del ataque de un pequeño depredador. Los guardas de caza de la zona colocaron 36 trampas y, al poco, atraparon a 10
 hurones asilvestrados.